sábado, 28 de junio de 2008

Rubia de Pote...




Yo me pregunté "¿ por qué si mi madre es rubia, yo no lo soy?"
Mi razonamiento era bastante lógico, te lo puedo mostrar con un simple razonamiento deductivo

Si mi madre es rubia,
Mi padre vete tu a saber

por lo tanto yo tendría que ser rubio.

Para mi, lógico era un rato, pero no encontraba respuesta a mi color de pelo.
Por suerte sales de los 11 y cumples 12,13,14,15... y así succesivamente (cada año uno más)...
Hasta que un día, un día alguien te dice que tu madre se tiñe. Es una de aquellas grandes verdades en las que hacemos todo lo posible por ignorarlas ( véase también; los reyes magos no existen y tus padres también follan) pero hay algo que no miente ( y no se puede ignorar) y son las fotos. No era posible, no identificaba a aquel ser moreno azabache en aquel álbum familiar. Supongo que la única justificación que encontré es que ella también lo había tenido que pasar muy mal para ser como era y cambiar su color de pelo así a la buena de dios, porque dos décadas de rubia tienen que esconder muchos traumas.
Y respecto a mí y a mi color de pelo solo se una cosa que si se hubiese teñido antes o al menos durante el embarazo con mayor frecuencia yo ahora seria rubio natural.


* Por supuesto no os confundáis mi madre no es la de la foto ni mucho menos, es una señora de los pies a la cabeza.

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